Skip to main content

El Instituto Cultural de la Provincia de Buenos Aires inauguró este sábado la BIENALSUR 2023,  en el Museo Provincial de Arte Contemporáneo MAR de Mar del Plata. El inicio de esta cuarta edición fue con la presentación de “EXTRA/ordinario”, una exposición que une obras de 21 artistas provenientes de Argentina, Brasil, Colombia, España, Francia, Turquía y Uruguay. La entrada es gratuita.

La muestra “EXTRA/ordinario” es una invitación a deshabituar la mirada sobre las cosas de todos los días para develar su potencial subversivo, cuestionando el canon de lo cotidiano y poniendo en evidencia un nuevo orden. En torno a las obras, que estarán repensadas en este nuevo contexto, resuenan numerosos aspectos de nuestro presente: desde la problemática medioambiental hasta la del consumo, desde el cuidado hasta la manera en que lo cotidiano se vuelve extraño. Entre los artistas participantes están los argentinos Gaspar Libedinsky, Esteban Álvarez, Mariana Tellería, Delia Cancela, Liliana Porter, Amadeo Azar, Leonardo Damonte, Mimi Laquidara, Eugenia Calvo, Daniel Basso, Irina Kirchuk, Juliana Iriart y Nicolás Bacal; la francoargentina Marie Orensanz; la brasileña Regina Silveira; los uruguayos Pedro Tyler y Marco Maggi; la colombiana Olga Huyke; el francés Pierre Ardouvin; el turco Ali Kazma y el español Pedro G. Romero.

La exposición reconfigurará el interior del Museo MAR desde su hall de entrada, donde Esteban Álvarez instaló “Un año de aire”, una nube gigantesca de botellas de agua mineral interconectadas, de la que cuelgan mascarillas para respirar el aire que circula por ellas. Las botellas, obtenidas de material de reciclaje, volverán al circuito de reciclado una vez terminada BIENALSUR, como parte de una práctica artística comprometida con la sustentabilidad del planeta.

El día de la apertura, el “Biscoito Arte” con que Regina Silveira invitaba en 1976 a los espectadores a comer literalmente su obra, documentado fotográficamente y expuesto en el Museo, adquirirá una dimensión performática y se ofrecerán las mismas galletas para que el público pueda consumir arte con todos los sentidos, al tiempo que se exhibirá el histórico dispositivo y las imágenes documentales de aquella icónica intervención.

Esta vez, “El origen de las especies”, sitio específico de Gaspar Libedinsky, funcionará como metáfora de la necesidad de protección del medioambiente. Se trata de un arrecife que hará con los escobillones de uso cotidiano y que ya son una marca personal. Los mismos también regresarán al mercado una vez finalizada BIENALSUR, intervenidos con una brevísima etiqueta dando cuenta de que fueron usados en la muestra “EXTRA/ordinario”.

Varias propuestas girarán en torno a los nuevos sentidos que pueden adquirir las cosas que nos rodean al ser reconfiguradas estéticamente: desde “Figuraciones contradictorias en tres ficciones y algunas variables”, una instalación lumínica de gran tamaño creada por Leonardo Damonte; a las “Intenciones Muralistas” de Mimí Laquidara a partir de los dibujos de objetos que recogió en mercados, tianguis y tienditas mexicanas; pasando por los breves relatos visuales de Eugenia Calvo sobre lo peculiar en lo cotidiano.

Por otra parte, el tiempo será objeto de varias propuestas: de la instalación “Taxonomía de una línea”, hecha con mecanismos de relojes desarmados por Olga Huyke; del video “Clock master” de Ali Kazma; y de alguna manera también lo será en la acción festiva y celebratoria de “Lanzamiento”, de Juliana Iriart, quien se pasa días recortando el material que luego lanzará en dos minutos, en la explanada del MAR, siguiendo una especie de partitura de color.

En tanto, las constelaciones que Nicolás Bacal arma con banquitos y mesas a los que le incrusta objetos de la vida cotidiana tendrán con “La velocidad de las cosas” un capítulo sur en la muestra inaugural de la BIENALSUR y un capítulo norte que se inaugurará más tarde en el Museo Nacional de Arte Decorativo de la Ciudad de Buenos Aires: una propuesta para repensar el cielo del sur, su mitología y su sentido a partir de las cosas más comunes.

A todo esto se suman las sopapas y demás objetos intrascendentes que, rescatados por Irina Kirchuk, funcionan como un vistazo a la psique de la ciudad; y una instalación de Mariana Tellería, que seguirá trabajando sobre la significación cultural de las cosas cotidianas, guiada por la posibilidad de generar sincronías entre formas y sentidos lejanos, como la iconografía religiosa, la basura y la moda.

Además estarán presentes “Democracia”, el juego de living partido al medio (sillón, mesa ratona, alfombra persa) con que Pierre Ardouvin sigue cultivando paradojas: escenas engañosamente alegres y realmente pesadas; y los retratos de escritores malditos hechos con cintas métricas de madera con que Pedro Tyler cuestiona la seguridad depositada en los sistemas de medida y la precisión, entre otros.

BIENALSUR es una red global colaborativa, creada y dirigida por los argentinos Aníbal Jozami y Diana Wechsler que, defendiendo lo singular en lo diverso y lo local en lo global, apuesta a diluir distancias y fronteras, reales y simbólicas, a través del arte y la cultura, convencida de que se trata de un derecho humano básico que posibilita visibilizar otros derechos.

BIENALSUR incluye proyectos seleccionados mediante convocatorias internacionales abiertas, así como obras de artistas clave que responden a su compromiso de desarrollar un humanismo contemporáneo; es decir, busca construir nuevos puentes de diálogo que hagan de cada espacio de arte un lugar de pensamiento y ampliar audiencias bajo la propuesta de pensar a partir de imágenes y experiencias estéticas.